Este viernes, 16 de noviembre, a partir de las 7 de la tarde el historiador Patxi Garmendia “Mendigar”, impartirá en Barrena Kultur Etxea una charla  con el título “Aproximación a la historia de Ordizia a través de las vías y medios de comunicación”, charla organizada por el departamento de Cultura del Ayuntamiento de Ordizia, dentro de las actividades del 750 aniversario de Ordizia.

El historiador ordiziarra Patxi Garmendia, profesor y colaborador habitual de la revista “Santa Ana”  subrayará la situación estratégica del municipio de Ordizia. La exposición comenzara en la época romana en Gipuzkoa, con una presencia centrada en la desembocadura del río Bidasoa, Oiasso, y más débil en el interior de la provincia. Existia una ruta que enlazaba el Bidasoa con la ría de Gernika que entraba en Bizkaia por Astigarribia.

En nuestra zona destacar la influencia de la calzada romana Astorga-Burdeos. Las influencias romanas penetraron a través de la sierra de Aralar por caminos autóctonos de carácter pastoril. Cobran importancia la calzada de Enirio, Lizarrausti,  Ataun, Etxegarate y el rio Urtsuaran, Sandrati (San Adrian) y Arlaban. (Lenitz-Gatzaga). Existen evidencias arqueológicas  que certifican la utilización de estas vías por los viajeros romanos.

Tras el desmoronamiento del imperio Romano entramos en un período escuro que comienza a iluminarse hacia el siglos X-XI con la aparición de aldeas, castillos, “monasterios” e iglesias, cabañas en Aralar, que servirán para empezar a fijar una red caminera en Gipuzkoa. En esa época se producen las primeras donaciones guipuzcoanas a monasterios del interior navarro y aragonés (San Juan de la Peña, Leire, Roncesvalles)  que demuestran  la existencia de  vías de penetración desde Navarra. Se establece una  relación entre los bienes donados, las rutas de trashumancia, destacando la que une Aralar con la costa gipuzkoana a través de Zelatun y Andazarrate. Ruta que los entusiastas montañeros/as  Ordizianos, quizás sin conocer el valor de esos parajes,  rememoran anualmente desde hace 50 años.

Hasta el siglo XIII, era las rutas transversales Este-Oeste  las más importantes., salvo la ruta de San Adrián que coincidía con una de las variantes del Camino de Santiago. Con la fundación por reyes castellanos de 25 villas en los siglos XIII-XIV son las rutas longitudinales, siguen los ríos Deba y Oria las que cobran protagonismo. Con los Reyes Catolicos surgirá el sistema de correos que será privatizado por los reyes de la casa de Austria. Ordizia será estación de postas. Veremos pasar a arrieros, acémilas y carretas.

Hasta la llegada de los Borbones con Felipe V no habrá una implicación de la monarquía en las infraestructuras. Se publifica el sistema de correos y se establece un plan de carreteras  radiales. La carretera Madrid-Irún era una de ellas. Las obras en Ordizia finalizaron en 1772. Con las nuevas infraestructuras aparecen las diligencias, solo accesibles a las personas de mayor poder adquisitivo, y las galeras terrestres.

La llegada del ferrocarril supuso una auténtica revolución. Su construcción, sobre todo el tramo entre Ordizia y Altsasua, fue un trabajo titánico, una auténtica epopeya.

De forma paralela Ordizia quedará comunicada por medio de carreteras con todos los pueblos del entorno goierritarra.  Conoceremos la llegada del telégrafo óptico, de escasa vigencia,  con torre de recepción y emisión el Altzagarate, el telégrafo, el teléfono y por último la televisión