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Ayuntamientos de Ordizia y de Zaldibia: “Seguiremos el tema de cerca y continuaremos exigiendo las responsabilidades pertinentes a Medio Ambiente”

En la comparecencia que ha tenido lugar esta mañana han estado presentes Adur Ezenarro, alcalde de Ordizia; Eztitxu Mujika, alcaldesa de Zaldibia; Maitane Álvarez, teniente de alcalde de Ordizia, y Mikel Luloaga, teniente de alcalde de Zaldibia. Han tenido como objetivo dar explicaciones a los y las ordiziarras y zaldibiarras sobre la noticia que apareció ayer en varios medios de comunicación sobre el níquel. Los detalles de lo que han dicho aquí:

La calidad del aire no es nuestra competencia. Los Ayuntamientos no tenemos recursos para poder hacer esas mediciones, pero el hecho de que no tengamos competencias no significa que no tengamos responsabilidad. Porque son una gran responsabilidad los temas que afectan a la salud de los habitantes de nuestros pueblos.

Por esa responsabilidad solicitó el Ayuntamiento de Ordizia una reunión con el departamento de Medio Ambiente. La reunión fue convocada para ayer, 6 de febrero, y a ella, por primera vez, invitaron a los representantes de Zaldibia, por lo que nos reunimos ayer en Vitoria con la viceconsejera de Medio Ambiente, Elena Moreno, y cuando aún no habíamos salido de Lakua, ya se había expandido la noticia en algunos medios de comunicación. Por lo tanto, las y los ciudadanos y las y los representantes municipales recibimos la información en el mismo momento.

En el caso de Zaldibia, además, ayer fue la primera vez que los representantes municipales recibimos información sobre este tema. Anteriormente, con este Departamento sólo hemos mantenido contactos para facilitar la colocación de vehículos de medida dentro de un examen aéreo. En este sentido comenzó nuestra preocupación, así como la de la ciudadanía, y el Ayuntamiento solicitó al Departamento que nos informara cuanto antes de los resultados del estudio y que nos convocara a la reunión de ayer.

En el caso de Ordizia, conocimos este tema recién entrado en el Ayuntamiento, y por la responsabilidad inicialmente mencionada, el mismo 6 de agosto, solicitamos explicaciones al Departamento de Medio Ambiente, solicitando que en septiembre se reuniera con nosotros de urgencia. Así, el miércoles 18 de septiembre nos reunimos en Lakua con Elena Moreno, en la oficina de la Viceconsejera de Medio Ambiente del Gobierno Vasco, y con la y el técnico Saioa Ferro e Iban López, que han llevado a cabo las investigaciones hasta ese momento.

En resumen, se nos indicó que al hilo de las mediciones que se realizan en 2016 en el marco del proyecto INMA (Infancia y Medio Ambiente), las mediciones del níquel superaban las cantidades admitidas y se inició un estudio en colaboración con el Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente del Gobierno Vasco. Esta investigación detectó varias fuentes sin resolver y se tomaron medidas. Las empresas han tomado las medidas establecidas desde el principio, y cabe destacar no ha habido vertidos ilegales; solamente que no se preveían en los procesos de producción. Cumplían los requisitos que debían cumplir legalmente, y ahora también han cumplido con las nuevas medidas desde el primer momento que se les han pedido. Así, se mejoraron los resultados de las mediciones de calidad del aire y se consideró que el problema se había solucionado. Sin embargo, los datos de finales de 2018 volvieron a ser altos y se concluyó que el tema no estaba resuelto.

En aquella reunión se nos indicó que se desconocían las fuentes de vertido de níquel y que las hipótesis utilizadas anteriormente no justificaban estos resultados. Por eso nos indicaron que iban a poner en marcha una nueva campaña de investigación, que iba a durar hasta enero de 2020. Se nos indicó que se iban a poner más medidores y más medios para poder detectar las fuentes.

Ante nuestra preocupación, convocamos a los responsables del proyecto INMA, que no estaban en aquella reunión, y el miércoles 25 de septiembre nos reunimos en el Ayuntamiento de Ordizia con Jesús Ibarluzea y Aitana Lertxundi. También nos reunimos el martes 15 de octubre en el Ayuntamiento de Ordizia con los representantes de Salud Pública Juan José Aurrekoetxea y Jesús Angel Ocio. El objetivo fue conocer los efectos que la situación del níquel puede tener sobre la salud de la población. Se nos indicó que la situación no era aceptable y por eso pidieron que se tomaran medidas, pero que si se ponía el tema en vías de solución, podríamos evitar impactos. Porque lo peligroso del níquel es que sea una exposición continua y prolongada en el tiempo.

Este año en enero nosotros mismos hemos solicitado también esta segunda reunión, porque queríamos conocer los resultados de esa campaña de investigación que nos explicaron en septiembre. En ella se nos indica lo que se difundió en la nota de prensa de ayer. Es decir, que se ha encontrado una segunda fuente ubicada en Zaldibia, y que en este caso también ya se han tomado medidas. En el caso de esta segunda empresa tampoco se preveía que se pudieran dar estos vertidos y desde el principio se han tomado medidas.

En cualquier caso, desde ambos Ayuntamientos trasladamos un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía, con las medidas adoptadas conociendo las fuentes de vertido y las que se van a adoptar, ya que el Departamento de Medio Ambiente prevé una reducción significativa de la presencia de partículas níquel en el aire. Sin embargo, seguiremos con responsabilidad y seguiremos pidiendo explicaciones al Departamento de Medio Ambiente hasta conocer los resultados de las medidas adoptadas.